Número
29 | Julio-diciembre, 2019 | ISSN 1870-5308
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Instituto
de Investigaciones en Educación |
Universidad Veracruzana
Reseña
Polifonías
de memoria revitalizadoras de la lengua y de la educación comunal: un proyecto
educativo emergente desde el corazonar[1]
Susan
Street
Recibido: 20 de
mayo 2019
Aceptado: 3 de junio de 2019
Moreno,
R. (coord.), Concejo Mayor del Gobierno Comunal de Cherán y Universidad de
Guadalajara. (2019). Cherán K’eri:
Xanaruecha engajtsïni miatántajka juchaari jurhéntperakuani / Caminos para
recordar nuestra educación. 232 pp. ISBN: 978 84 17840 04 4
Pocas
veces llega a las manos un libro del talante de Cherán K’eri. Es de
festejar su publicación; el libro es en sí una celebración de la potencia de
una obra profundamente colectiva, esculpida en polifonías y rebosante de
testimonios, a la vez que motivo de reflexión teórico-práctica sobre las
educaciones emergentes en las luchas sociales.[2]
Este libro nació de muchos corazones individuales y colectivos de quienes
querían recordar, para poder aprender de, los procesos instituyentes de
autonomías locales de un pueblo que se hartó de estar perdiendo su patrimonio
en bosques e identidades. En su ‘¡ya basta!’ del 15 de abril de 2011, se
prendió la mecha que recorrió la pradera, incitando a la movilización y a la
auto-organización para cuidarse ellos mismos rodeados de sus bosques cuyos
árboles ya no serán talados al antojo mercantil y criminal de otros.[3]
Los
autores de los capítulos del libro buscaron reconstruir cómo fue que esta
chispa de rebelión se difundió por el territorio social del sistema educativo
del municipio de Cherán, tocando los nervios del sentí-pensar de sus
habitantes, y despertando recuerdos de anteriores instancias autonómicas con
raíces en el ser p’urhépecha, recuerdos que urgían rescatar ‒y convertir en
memoria‒ desde y para los niños, jóvenes y adultos.
En
este libro toman la palabra los participantes directos en los hechos
autonómicos de Cherán de esta década: algunos son comuneros, otras maestras y
académicas, algunas abuelas, algunos niños y jóvenes; todos han sido afectados
por un nuevo fervor pedagógico que se quiere registrar y teorizar para
visibilizar las praxis educativas imbuidas que han enriquecido sus vidas. Es
revelador fijarnos en las semblanzas curriculares de las y los autores al final
del libro; notamos que varios compartieron los mismos espacios formativos, en
particular, destacan los diplomados “Sistematización del Conocimiento indígena”
y “Diseño de materiales educativos interculturales y bilingües” y la Red de
Educación Inductiva Intercultural.[4]
Éstos jugaron un papel crucial en la capacitación docente para sensibilizar a
maestros hacia la educación comunitaria,
inseparable de la comunalidad como práctica de los valores p’urhépecha
(traducidos y descritos en el capítulo de Alicia Lemus Jiménez).
La
coordinadora del libro, investigadora de la Universidad de Guadalajara, explica
en la introducción la complicada trama de eventos y procesos que culminaron en
la co-edición del libro, trama que fue una verdadera viacrucis de
intermediación entretejida por Rocío Moreno Badajoz con pobladores, maestros,
consejeros, funcionarios y autores, cuyos roles arraigados en lógicas
dialógicas distintas en tensión hubo que armonizar en determinados momentos.
Pero la clave para ella, tras cinco años de investigación-acción en la
comunidad y el municipio indígena de Cherán, fue nunca perder de vista su
compromiso formalizado públicamente en el festejo del aniversario sexto en 2017
con el Consejo Mayor del Gobierno Comunal de Cherán (2015-2018), compromiso que
continúa aun después del libro editado, ahora en su última etapa de
distribución y discusión al interior de las escuelas, con los maestros de la educación institucional. Uno de los
primeros capítulos repasa la historia de la amplia infraestructura de escuelas
en todos los niveles y modalidades escolares del sistema educativo público en
el municipio de Cherán, dando sustento a la importante presencia de la
institucionalidad pública del Estado mexicano en la región.
Los
estudios que tenemos sobre lo que Erika González Apodaca (2008) ha nombrado ‘la
educación propia’, y que otros llaman ‘educación autonómica’ (De Aguinaga,
2010; Bertely, 2012; Baronnet, 2009; Rojas, 2012), forman parte del campo de la
investigación sobre la educación intercultural (Dietz, 2012; Bertely, Dietz y
Díaz, 2013). Estos estudios se suelen abordar como ‘estudios de caso
monográficos’ ya que destacan primordialmente las características básicas que
permiten argumentar la existencia de un ‘proyecto educativo alternativo’
(PEA). En destacadas ocasiones se
relacionan estas cualidades con una explicación de los procesos constitutivos.
Ciertamente, estos son los estudios relevantes para una discusión académica en
torno a Cherán K’eri y por tanto
desde donde interrogar el ‘caso’ construido en este libro se deviene
fructífero.
Sin
embargo, el propósito del libro no es demostrar que en Cherán se ha conformado
un PEA, aun cuando a todas luces éste ha ido tomando forma como destaca Alberto
Colín en su capítulo, sino ofrecer un compendio sistematizado de narrativas
relatadas por una amplia gama de participantes en la auto-organización y en la
resistencia al despojo territorial (de bosques) cuyo valor es localmente
celebrado como un registro de la memoria colectiva. El vislumbrar contenidos
específicos pedagógicos de esta memoria es valorado por los autores como una
serie de inter-aprendizajes vitales para continuar el empuje transformativo en
espacios institucionales todavía no tan directamente involucrados. En cada
capítulo, los inter-aprendizajes son identificados e ilustrados por una lógica
de recuperación de significados explayados en las prácticas tradicionales
p’urhépecha (la ronda tradicional, la fogata, la milpa), re-construidos desde
la lengua, y re-interpretados inseparables de los principios de la educación
comunitaria a la hora de re-aparecer en las acciones del movimiento por
sostener la afirmación autonómica.
El
libro es circular, espiral, nada lineal: se comienza con el levantamiento que
se hace movimiento y que se hace nuevo gobierno autónomo; se establecen las
Rondas Tradicionales que son re-invenciones de una modalidad anterior de
autodefensa, de seguridad, de cuidado; luego las Fogatas como los nodos de
encuentro, logística barrial, luego el Concejo y las Asambleas Barriales;
sabemos que algunos maestros están en cada uno de estos nodos, y que hay
maestros que participan en llevar la escuela a los proyectos de la Milpa y del
Bosque (cosechar maíz y reforestar bosques). La escritura de los capítulos
reitera sutilmente este esquema básico, enriqueciendo con relatos las particulares
experiencias según el nivel de escolaridad, edad de niños y jóvenes, el
abordaje metodológico, y la perspectiva de cada autor íntimamente relacionada
con la participación personal en los procesos políticos del Cherán K’eri.
Entonces,
el carácter inter-actoral de este libro colectivo se enfoca en vislumbrar las
instancias emergentes del levantamiento de 2011 como herramientas pedagógicas
que reúnen y reconstituye roles de los agentes escolares: maestros y maestras,
educadoras, comuneros y comuneras de Cherán, estudiantes de las escuelas
locales de todos los niveles, madres y padres y abuelos. Las relaciones entre
todos ellos son reconfiguradas social, político y culturalmente por la acción
colectiva del ‘auto-sitio’ y ‘auto-defensa’ del 15 de abril 2011 que trasciende
hasta hoy. Asimismo, la reivindicación étnica y lingüística de la cultura
purépecha y la re-institución ‒netamente colectiva‒ de los principios y los
valores, todo ello es una fuerza vital que es evidenciada como inherente a los
inter-aprendizajes rescatados por los autores en sus metodologías horizontales
e interactivos de los talleres como medios narrativos y analíticos. Los
contenidos muy detallados vinculando la historicidad de las prácticas
culturales p’urhépechas con las maneras concretas de recuperar las acciones
reflexionadas colectivamente durante el autositio y teorizadas en su aporte de
inter-aprendizaje hace una lectura fascinante precisamente por su singularidad.
La
concepción novedosa aportada por este libro surge de la forma constitutiva de
la memoria colectiva del pueblo Cherán ‒ahora el Cherán K’eri‒ en tres tiempos
y espacios distintos: rescate de la memoria histórica empreñada en la lengua
p’urhépecha, las acciones político-pedagógicas del movimiento y las
intervenciones de la investigación educativa a partir de 2012.[5] La apuesta de esta investigación colaborativa
es epistemológica: busca comunicar las experiencias de diferentes sujetos a
través de testimonios, narrativas y relatos generados en momentos y espacios
interactivos propicios para una reflexión compartida (en talleres, en
ejercicios reflexivos a través de rescates autobiográficos de fotografías
familiares, en recorridos estudiantiles, en colectas herbolarias con las
abuelas, en acciones de reforestación de jóvenes, todo ello una pedagogía de
‘ir-haciendo’). A modo de ejemplo, observen lo dicho por Jurhamuti José
Velázquez Morales, quien describe el taller (2011-12) con niños que
participaron al lado de sus padres en todas las instancias del movimiento
(asambleas, consultas, marchas, recorridos al bosque).
“…las fogatas nacen ante la necesidad de
cuidarse unos a otros…como miembro de la fogata 14, adscrito al Barrios Segundo
o K’etsikua y en los casi 10 meses
que duró la etapa inicial del movimiento, junto con nuestros compañeros y
compañeras de fogata generamos un cariño a este espacio y establecimos lazos de
amistad, ya que todas las noches compartíamos alimento, desvelos y
preocupaciones. Vivir en la fogata dejó
una gran lección de apoyo solidario en la comunidad… (p. 114)
La fogata o parhankua/parhangua –elemento
histórico culturalmente significativo– ha sido la institución de diálogo que
generalmente se ha ubicado en el centro de las cocinas p’urhépecha”. (p. 116)
Rocío
Moreno retomó y tejió teóricamente el tema de la participación de los niños en
las fogatas y en los festejos.
“Al involucrarse la niñez en las tareas
festivas, éstas adquirieron de forma práctica aprendizajes situados en los
modos propios de organización comunitaria, en colaboración con la familia, y
los adultos. De un lado, las celebraciones comunitarias permiten, con métodos
propios de enseñanza-aprendizaje, la apropiación de habilidades, consistentes
en observar las actividades de los mayores, imitarlos y colaborar en ellos, en
el ir-haciendo (Moreno, 2014). De otro
lado, incorporan las normas sociales de respeto, la reciprocidad (uéchantani) y
la ayuda mutua (jarhopikua): un conjunto de valores que ayudan a perpetuar las
relaciones sociales, la cohesión social y la identidad cultural… (A través de
la) educación practicada en las fogatas…la niñez de Cherán recibió un ‘sistema
pedagógico comunal’ (Martínez Luna, 2013) asentado en el trabajo comunitario y
político cotidiano”. (pp. 185-186)
El
libro en su conjunto logra documentar una resignificación del papel tradicional
de la escuela como transmisores de conocimientos legitimados ‘nacionales’ (y de
aculturación indigenista) hacia una gran apertura para repensarse como espacios
de encuentros y de aprendizajes surgidos y apropiados (siempre diferencialmente
entre sujetos diversos) entre saberes comunitarios locales, interrogados desde
procesos afirmativos de pertenencia p’urhépecha. Por ello, la lectura de este
libro me mantuvo en un estado agitado de alegría y emoción, por lo que hablar
en términos de ‘lo alternativo’ resulta poco gratificante, hay que precisar más
con la ayuda de una perspectiva como la que ofrece Patricio Guerrero (2018, 19)
sobre la cosmoexistencia. “El
corazonar propone la sanación del ser; de ahí que sentimos que el corazonar
puede mirárselo como una propuesta no solo para la decolonialidad del poder,
del saber y del ser, sino sobre todo para la sanación de la vida”.
Leer
Cherán K’eri es arraigar la esperanza
en las pequeñas grandes luchas por sanar la cosmoexistencia al poner el pie,
las manos y el corazón en un territorio (social) que se ha hecho pedagógico y
políticamente vital para nuestro México. ⸭
Referencias
Baronnet, B. (2009). Autonomía y educación indígena: Las escuelas
zapatistas de las Cañadas de la Selva Lacandona de Chiapas, México. Tesis doctoral. México: El
Colegio de México.
Bertely,
M. (coord.). (2012). Tarjetas de auto-interaprendizaje
(Michoacán, Oaxaca, Chiapas y Puebla). México:
Laboratorio de Lengua y Cultura Víctor Franco-CIESAS.
Bertely, M., Dietz, G., Díaz, M.
(coords.). (2013). Multiculturalismo y
educación 2002-2011. México: ANUIES-COMIE.
De
Aguinaga, R. (2010).
Tatuutsi
Maxakwaxi, una experiencia indígena de educación autonómica. Guadalajara: ITESO.
Dietz, G. (2012).
Multiculturalismo, interculturalidad y
diversidad en educación. Una aproximación antropológica. México: Fondo de
Cultura Económica.
González,
E. (2008). Los profesionistas indios en la educación intercultural.
Etnicidad, intermediación y escuela en territorio mixe. México: UAM-Juan
Pablos.
Martínez
Luna, J. (2013). Resistencia comunitaria y cultura popular. Textos sobre el camino andado, tomo 1,
79-92.
Moreno, R.
(2014). Otra forma de realizar el quehacer etnográfico con los pueblos
indígenas. En Osesuna, C. y Mata, P. (eds.), Gestión de acceso al campo y devolución de
los resultados (pp. 53-60). España:
Traficantes de sueños.
Rojas, A.
(2012). Escolaridad y política en
interculturalidad; los jóvenes wixaritari en una
secundaria de huicholes. Guadalajara: CIESAS-Universidad de
Guadalajara-ITESO.
[1]
Patricio Guerrero Arias, (2018). La
Chakana de corazonar desde las espiritualidades y sabidurías insurgentes del
Abya Yala. Quito, Ecuador: Universidad Politécnica Salesiana.
[2]
Esta reseña es una re-elaboración de la participación de la autora, junto con
Gunther Dietz, Alberto Colín, Bruno Baronnet y Rocío Moreno en la presentación
del libro el 27 de marzo de 2019 en el Auditorio “Gonzalo Aguirre Beltrán” del
Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la Universidad Veracruzana,
Xalapa, Veracruz.
[3]
Véase el antecedente editorial de Cherán
K’eri. 5 años de autonomía; Por la seguridad, justicia y la reconstitución de
nuestro territorio, Consejo Mayor de Gobierno Comunal de Cherán
(2015-2018).
[4]
Parte del proyecto de investigación de María Bertely (2012), qepd, basada en el
diálogo de Bertely con el peruano Jorge Gasché.
[5]
Foros, conferencias, entrevistas, observación participativa, diplomados.